Un sueño hecho realidad llego a San Andres de Giles, un auto de lujo, de colección, realizado completamente por manos locales. Un proyecto que comenzó en 2013 fue avanzando hasta empezar con el deseo familiar de un ex piloto de Formula 1.
Mucho tuvo que ver el ingeniero industrial Hernan Balmaceda, quien armo su equipo de trabajo, con el aval de Pablo Bucci, sobrino de Clemar Bucci, piloto de carreras, descendiente de Domingo Bucci, piloto y aviador. Balmaceda que habia trabajado en el Special Bucci 2013, siguió en contacto con la familia para invocar un nuevo desafio, el Bucci 300.
Familia Bucci
El piloto oriundo de Zenón Pereyra fue el primer argentino en correr en Europa, luego de ganar el campeonato de 1947. Un año más tarde, en el Grand Prix (competición previa al mundial de pilotos) de San Remo con un Maserati 4CL, logró el 3° puesto detrás de Alberto Ascari y Luigi Villoresi. Compitió dos temporadas en la máxima categoría (1954/55) con el equipo Gordini, Maserati y Ferrari.
Nacido en el año 1920 en Zenón Pereyra, Clemar Bucci, continuó la tradicional familiar iniciada por su padre Domingo a principios del Siglo XX y con el correr de los años dio impulso a la Scuderia Bucci, que hoy guarda sus tesoros en uno de los museos del deporte motor más importantes de país, ubicado en la localidad del departamento Castellanos.
Clemar Bucci, fue el primer argentino en correr en Europa, luego de ganar el campeonato de 1947 y el segundo piloto santafesino en correr en la Fórmula 1 detrás del oriundo de Las Rosas, Alfredo Pián. En el Grand Prix (competición previa al mundial de pilotos) de San Remo con un Maserati 4CL, logró el 3° puesto detrás de Alberto Ascari y Luigi Villoresi.
Durante su estadía en Zenón Pereyra, Domingo Bucci, tuvo dos hijos, Rholand y Clemar. “El más chico, Clemar, se convirtió en el primer piloto argentino que sale a correr al exterior, antes que Fangio dado que corrió las carreras de Grand Prix antecesoras de la Fórmula 1 moderna. A su regreso se reúne con el entonces presidente Juan Domingo Perón, para armar el Equipo Argentino de F1. Al regreso de la primera temporada, Perón le preguntó que necesitan para afianzar los buenos resultados conseguidos en 1950. Él le comenta que las pruebas que se hacía en la calle y sobre la costanera de Buenos Aires resultaban muy peligrosas y a raíz de ese pedido nace la construcción del Autódromo de Buenos Aires”
Como su padre Domingo, Clemar dedicó gran parte de su vida al diseño y construcción de autos deportivos, que hoy pueden observarse en el Museo Bucci: Mercedes-Benz 300 SL Panamericana; Mercedez-Benz SLR 300 (Una recreación de las Flecha de Plata 1955, hechas íntegramente a mano); Dogo SS 2000 (un Súper Deportivo Nacional) y el Bucci Special 2013 una aventura que continúo hasta su muerte en enero de 2011 y que terminó por fabricar su sobrino Pablo Bucci, fue la vedette del Salón del Automóvil de Buenos Aires ese año.